Tres en una taza

Tres en una taza
Este no es un libro. Es una fiesta. Una fiesta de la imaginación, del lenguaje, una celebración de la vida que no elude la muerte, la asimila con la despedida desmesurada de un gran poeta que deja una mitología y una ausencia irremediable. La novela recorre la ciudad en un viaje alucinado. Por ella desfila toda la fauna urbana en una realidad que se multiplica y se desdobla como el propio protagonista. La ciudad es un golem de sus habitantes. El metabolismo de la ciudad nos absorbe hasta la última página. El amor y la angustia, la mezquindad y la grandeza se traman en una historia que deslumbra sin respiro párrafo a párrafo. Transitar esta novela es, más que una experiencia literaria, una experiencia vital contada a un ritmo trepidante donde cada palabra encontrará asidero en nuestros sueños y nuestras pesadillas. A este libro le asiste la virtud de las grandes novelas: cada lector sentirá que ha sido escrito a su medida. Y no le falta razón. Luis Manuel García Méndez
Este no es un libro. Es una fiesta. Una fiesta de la imaginación, del lenguaje, una celebración de la vida que no elude la muerte, la asimila con la despedida desmesurada de un gran poeta que deja una mitología y una ausencia irremediable. La novela recorre la ciudad en un viaje alucinado. Por ella desfila toda la fauna urbana en una realidad que se multiplica y se desdobla como el propio protagonista. La ciudad es un golem de sus habitantes. El metabolismo de la ciudad nos absorbe hasta la última página. El amor y la angustia, la mezquindad y la grandeza se traman en una historia que deslumbra sin respiro párrafo a párrafo. Transitar esta novela es, más que una experiencia literaria, una experiencia vital contada a un ritmo trepidante donde cada palabra encontrará asidero en nuestros sueños y nuestras pesadillas. A este libro le asiste la virtud de las grandes novelas: cada lector sentirá que ha sido escrito a su medida. Y no le falta razón. Luis Manuel García Méndez